FRACASO CAMPS - ¿Para qué sirve la cláusula Camps?

Lo que resulta insoportable del discurso de un político es tener la sensación, la convicción o la pura constatación que se dirige hacia el público con el desprecio de quien más allá de su nariz sólo ve desinformados o dicho suavemente ingenuos destinados a comprar cualquier suerte de propaganda.

Esta semana el presidente de la Generalitat ha hecho una cabriola que sólo desde ésa visión que les comentaba puede entenderse.

Después de no haber querido situar en el Estatuto nada referido a la financiación y Haber conseguido que no figure ninguna mención a las inversiones estructurales pendientes –aquello que en algunas comunidades han denominado deuda histórica-, después de haber hecho el ridículo espantoso al presentar un recurso de anticonstitucionalidad contra el estatuto de Andalucía porque incorporaba una disposición que cifraba un porcentaje de inversiones durante un periodo determinado y ser literalmente desautorizado por el Alto Tribunal que tildó de extravagante la actitud del gobierno valenciano, después de exhibir urbi et orbe la famosa cláusula que bautizó como solución para todo el desarrollo institucional, ahora resulta que Camps quiere cambiar el estatuto para poner una disposición semejante a la de andaluces y catalanes.

En el debate de la reforma del estatuto valenciano, Camps –más ausente que nunca- se sacó un conejo de la chistera que venía a decir que cualquier cosa que apareciera en cualquier reforma estatutaria y fuera supuestamente beneficiosa seria inmediatamente abducida por nuestra carta autonómica.

Ahora, el PP para responder a unos presupuestos generales del estado que con el mayor crecimiento de todas las comunidades autónomas han dejado en evidencia la política victimista, ha reabierto por unas horas la reforma de la reforma para situar en el papel aquello que el PP valenciano ha recurrido en Andalucía y que el PP de España ha recurrido en Catalunya.

Se trata del reconocimiento más sonoro de un fracaso y -sin faltar- de una estafa perpretada con alevosía. ¿Para que sirve la cláusula Camps? .La cláusula Camps no sirve para nada.

Eso ya lo dijeron los especialistas en derecho constitucional, la oposición y sobre todo, el sentido común.
Pero ahora es el propio inductor quien da el golpe mortal a la cláusula-ilusión.

Y como de lo que se trata es confundir se solapa el sistema de financiación con las inversiones territorializadas.

Yo ya entiendo que al final esto sea un rollo que supera a cualquiera y que a acaba aburriendo a todos aunque se trate de la gasolina para que el país marche. Ese es el resultado final que pretende el inductor.

Debates falsarios, bueno Camps, malo ZP, maniqueísmos sustentados en la
demagogia y una persistencia mecánica en la mentira continuada son la receta Camps que tan buen resultado le ha dado a él y tan rácano beneficio a los valencianos.

Y ADEMÁS

El desaguisado Camps ha sucumbido en los medios, sin embargo, ante el nuevo revival Ibarretxe.

El lendakari vasco ha ensayado una nueva huida hacia delante que orientada en el peor atributo del nacionalismo pone por delante sus intereses personales e intrapartidarios eso sí en nombre de la patria.

Josu Jon Imaz, un político clarividente en Euzkadi, ha perdido la batalla de la sensatez frente a quienes tensan la cuerda con el único objetivo de conseguir unas cuantas bazas de ventajismo. Como bien dice el aún líder del PNV el acuerdo prioritario es el diálogo entre diferentes, la convivencia entre los vascos de todas las ideas, no la relación del País Vasco y España. Y por encima de todo, el fin de la violencia.

Los ciudadanos vascos han decidido durante estos 30 años de democracia pero para el lendakari lo que no sea su solución de alambicados referendums no parece acomodarse a su necesidad convertida en la de todos.

Vaya semanita la de algunos presidentes autonómicos.
Buena semana y buena suerte.

Presupuestos con mirada social.

El vicepresidente Solbes ha cumplido esta mañana con la tradición parlamentaria de presentar las cuentas públicas del Estado que los legisladores habrán de discutir y finalmente, con las aportaciones de los grupos, aprobar.
El proyecto de ley que presenta el gobierno responde a la visión progresista que se le supone. Más gasto social, mayor impulso a las infraestructuras para el desarrollo económico y una disminución de impuestos para quienes viven de una nómina.
Los presupuestos son la hora de la verdad en la acción política. El destino de los recursos fija el retrato de las prioridades de un gobierno.
Un primer repaso a los presupuestos generales del Estado nos subraya algunas cifras que pueden ilustrar la mirada social de las cuentas de todos. Así el aumento del 16’4 por ciento en educación e I+D+I, el 7’4 por ciento de crecimiento de las pensiones, el 16’5 por ciento de incremento de las pensiones más bajas, el 118 por ciento más para la dependencia y el 9’7 por ciento para políticas de vivienda.
Con estos presupuestos el gobierno de Zapatero cumple con los compromisos que se marcó al inicio de legislatura de subir un 26 por ciento las pensiones mínimas, duplicar la inversión en I+D+I y alcanzar el 5 por ciento del PIB en los fondos dedicados a la ayuda al desarrollo.
Y en el debate siempre presente de las inversiones territorial izadas, la Comunitat Valenciana es la autonomía que más aumenta, crecen un 30 por ciento las inversiones con lo que es difícil para el PP continuar parapetándose en el victimismo. Los conservadores han sido capaces de enmarcar un discurso en el que todo lo malo es culpa del gobierno de España y las ineficiencias de la Generalitat son sólo fruto de las dejaciones de lo demás.
Los números, sin embargo, dejan al descubierto la propaganda.
Ahora toca pedirle al señor Camps que empiece a gobernar la Comunitat y deje de utilizar la máxima institución de los valencianos como una oficina electoral de Rajoy.
Lo fundamental es que las instituciones surgidas de las elecciones y, por tanto, depositarias de toda la legitimidad, se dediquen a desarrollar sus programas y cooperen para garantizar la mejora de la calidad de vida de los ciudadanos.
Cada uno debe aceptar su responsabilidad y el autogobierno que tantos años costó conseguir es un verdadero poder democrático cuando establece su agenda, la desarrolla y la defiende con los hechos.
El victimismo del que tantas veces se ha acusado, no siempre sin razón, a los gobiernos de signo nacionalista ha sido el modelo empleado esta legislatura por el consell de Camps que ha justificado su inoperancia con la persecución desde el gobierno central.
Brecht ya sentenció hace años que al final no se puede engañar permanentemente a todos. El uso de la propaganda masiva no podrá evitar la verdad.

Y ADEMÁS
Y para acabar permítanme un breve comentario a un artículo insidioso que el presidente de la Diputación le dedicó ayer al portavoz socialista y alcalde de Benicàssim.
La política es debate y, por tanto, cualquier actor de este espacio ha de estar curado de espanto y es más, debe ser absolutamente sensible a cualquier crítica. Eso nunca lo entendió el articulista de ayer. Los fracasos sonoros de quien lleva dictando los destinos de esta provincia en la que según su propia verbigracia nada se mueve sin su visto bueno, no puede endosárselos a la oposición que cumple con su deber de ejercer la crítica y además en el caso de Francesc Colomer siempre con moderación y educadamente. Dos términos, dos valores desconocidos para el advenedizo articulista.
Es cierto como señala el articulista que Castellón es una provincia que aporta más de lo que recibe. Sólo dos acotaciones que olvida el insigne articulista. Una, que con el gobierno Aznar se profundizó en ése déficit histórico y otra, que Castellón contribuye más gracias a quienes con el fruto de su trabajo cumplen religiosa o agnósticamente con Hacienda.
Y ése no es su caso. Para su vergüenza y la de todos.

Buena semana y buena suerte.

La Voz Digital: Entrevista a Ximo Puig

Ximo Puig afirma que lo fundamental no han de ser las personas, sino conformar un equipo

“El secretario general no tiene porque ser necesariamente candidato a la Generalitat

22.09.2007 V. Lafora .- Valencia


Ximo Puig, es uno de los pre-candidatos a liderar el PSPV-PSOE tras el próximo Congreso ordinario. Afirma que el partido ha sabido reconducir el traspiés electoral de las autonómicas evitando el Congreso extraordinario. Su serenidad personal la refleja en su acción política, y por ello, aboga por que el socialismo valenciano avance paso a paso. Primero, abordando con éxito las elecciones generales y defendiendo el modelo modernizador del PSOE y las inversiones realizadas en la Comunidad Valenciana. Segundo, encarar el proceso interno "fortaleciendo el partido". Un PSPV-PSOE que "combine la prosperidad y el crecimiento económico con la modernización de nuestra sociedad, la justicia social y el impulso de las iniciativas de emprendedores". Tercero, nombrar al candidato a la presidencia de la Generalitat. En su opinión, "el secretario general del partido no tiene porque ser necesariamente el candidato a la Generalitat".


Pregunta.- Después del revés electoral sufrido en las elecciones autonómicas y locales ¿Cómo ve el partido en estos momentos?

Respuesta.- Bueno yo veo que se ha serenado. Es cierto que el resultado electoral no fue favorable, pero pasados los primeros momentos, lógicos por otra parte, de cierto nerviosismo, pues yo creo que el partido ha reconducido la situación y por ello, ha reaccionado de una manera adecuada. Este es un partido serio, de gobierno y capaz de representar a la mayoría de la sociedad valenciana, y por tanto no puede vivir estos procesos desde reacciones histéricas. Por ese motivo, el partido ha asumido que finalmente no hemos conseguido lo que perseguíamos, y en estos momentos hemos de asumir nuestra función de oposición en Les Corts.


P.- Y en esa labor de oposición, ¿qué dirección piensa usted que debe adoptar el partido socialista?

R.- Es evidente que en estos momentos los socialistas valencianos tenemos una agenda política que tiene dos fases. La primera, es centrarnos en las elecciones generales y la segunda, una vez pasadas las generales, los socialistas valencianos hemos de abordar un proceso de reafirmación, rediseño y reforma del proyecto socialista.


P.- En esas dos etapas de las que hace mención, es evidente que respecto a las elecciones generales ya ha comenzado la precampaña. En ese sentido, ¿qué pueden aportar y qué deben aportar los socialistas valencianos?

R.- Nosotros, primero hemos de aportar al programa federal del PSOE propuestas beneficiosas para todos los españoles, pero también específicamente para todos los valencianos. Y además, también hemos de realizar una campaña de explicación de la que ha sido, en estos años, la acción de gobierno más positiva para el país en cuanto a la ampliación de las libertades, en el aspecto social también en el desarrollo de las infraestructuras, que posibilitará que en la próxima legislatura el AVE llegue a Valencia, que el problema del agua no sea un eslogan sino una solución y que la red de carreteras siga ampliándose. Todas esas cuestiones quedan ahora plasmadas en los presupuestos del Gobierno de este año que contemplan un incremento del 30% para el conjunto de la sociedad valenciana. Sin duda, con los presupuestos el Gobierno socialista evidencia una voluntad política clara y nítida que rompe la estrategia del victimismo del PP.


P.- Ha hecho mención al incremento del 30 por ciento para la Comunidad Valenciana en los presupuestos del Gobierno. No obstante, desde el Consell, el PP de Camps sigue centrado en su estrategia política contra la acción del Gobierno, y paralelamente exige mayor financiación en determinadas áreas como sanidad.

R.- Bueno quiero puntualizar varias cosas. Primero, los socialistas valencianos siempre hemos defendido un nuevo modelo de financiación para que la Comunidad valenciana tuviera los recursos necesarios para desarrollar su políticas, pero hay que recordar que el modelo actual de financiación, que ahora critica el Partido Popular de Camps, es el modelo Zaplana que con tanto entusiasmo aplaudió todo el PP valenciano y que iba a curarnos de todos nuestros males.


Segundo. Dicho esto, lo que debe hacer el gobierno de la Generalitat , pasados ya los cien días tras las elecciones, es dedicarse a gobernar. Los valencianos y valencianas no ha elegido a un gobierno autonómico para dedicarse a hacer oposición a Madrid, para eso ya están los disputados y senadores. Aquí, los ciudadanos han acudido a las urnas para designar un gobierno autonómico, y por ello, Camps y sus consellers no pueden estar permanentemente refugiados en la oposición a Madrid, tampoco deberían utilizar la Generalitat como la oficina electoral de Rajoy, eso es absolutamente deplorable puesto que va en detrimento de lo que es nuestra institución.


Y tercero, en cuanto a la cuestión sanitaria, se demuestra perfectamente que el mundo feliz de Francisco Camps dista mucho de la realidad. Nuestra autonomía con los gobiernos del Partido Popular está a la cola en inversión en sanidad. Somos la comunidad autónoma que menos camas tiene por habitante, la que menos médicos tiene por habitante, es decir, en estos años de gobierno del PP la inversión en sanidad ha sufrido un enorme retroceso. Es más, la mayoría de los hospitales se construyeron en la época de gobiernos del partido socialista valenciano y las únicas acciones del PP se han limitado a los hospitales de gestión privada como los de Alzira y Torrevieja, pero ningún hospital público. Y esa es la trágica realidad del PP de Camps, un mundo ficticio creado a través de la propaganda.


P.- ¿Cree que explicando esas tres cuestiones a las que ha hecho mención, defensa de un nuevo modelo de financiación, utilización de la Generalitat contra el Gobierno actual y la necesidad de impulsar una mayor inversión social, pueden dar un giro en las elecciones generales?

R.- Dos cosas. En la Comunidad Valenciana los socialistas valencianos hemos hecho siempre un esfuerzo por colaborar y cooperar en buscar fórmulas de entendimiento y de consenso, hemos insistido en la necesidad de aportar soluciones, desde el consenso, a los problemas que tiene hoy en día la sociedad valenciana. Pero frente a esa actitud, hemos chocado con la negativa del PP, porque el Partido Popular no le interesa, porque su estrategia está imbuida por la táctica de Rajoy de la confrontación. Quiero dejar claro esa cuestión, porque uno de los problemas del gobierno Camps es precisamente su debilidad como gobierno autónomo y su dependencia respecto a la política de oposición de Mariano Rajoy. Segundo, y dejando claro la ausencia por parte del PP valenciano de una acción de gobierno propiamente autónoma, pues es evidente que nosotros, los socialistas valencianos hemos de poner en valor la acción del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero a favor del conjunto de España pero también a favor de la Comunidad Valenciana. Y sin duda, para ello contamos con muchos argumentos positivos. Muchos, y lo que hemos de hacer es poner en nuestra agenda política en esa dirección y explicar como los valencianos y valencianas se ha visto beneficiados y se van a beneficiar del aumento de las pensiones, la aplicación del salario mínimo profesional, el desarrollo de los derechos individuales de los ciudadanos en su modelo de vida, la aplicación de políticas dirigidas a los jóvenes, caso de las ayudas a la vivienda, de avances sociales importantes reflejados en leyes como la ley de dependencia… En suma, de un amplio abanico de medidas que han sido favorables para toda la sociedad española, y por tanto, también para la valenciana. Por ello, los socialistas valencianos hemos de estar ahí, en la defensa de esa política de progreso que ha desarrollado el Gobierno, y lo hemos de hacer desde la ilusión, porque nosotros tenemos muchas cosas que decir y que aportar.


P.- ¿Pero, insito, cree que pueden invertir los resultados de las elecciones pasadas?

R.- Por supuesto, estoy convencido que vamos a sacar un buen resultado electoral.


P.- Dejando al margen la coyuntura electoral de cara a las generales, y centrémonos en la cuestión interna del partido. De cara al Congreso ordinario, se han presentado tres pre-candidatos. Usted, Jorge Alarte y Jordi Sevilla. ¿Qué puede aportar Ximo Puig al presente y futuro del partido?

R.- Bueno, es evidente que estamos en un proceso previo. Pero si propuse mi candidatura es porque surgió la posibilidad de celebrar un congreso extraordinario. Yo nunca he estado de acuerdo con esa opción, porque lo fundamental y lo básico en estos momentos, es sumar todos los esfuerzos en la dirección del proyecto de modernización que está llevando a cabo en España José Luis Rodríguez Zapatero. Por tanto, yo he puesto mi disposición a participar y encabezar un proyecto de modernización de nuestra sociedad y del socialismo valenciano y también, de conformar un equipo potente para abordar ese nuevo proceso. En ese sentido, el partido debe empezar a hablar y manejar más la primera persona del plural que la del singular. En mi opinión, lo sustancial es fortalecer el partido y nuestro proyecto y adaptarlo a lo que es la sociedad valenciana, porque es evidente que los valores de los valencianos y valencianas son valores progresistas, que corresponde a un partido socialdemócrata como el nuestro. Ahora bien, nosotros no hemos sido capaces de identificarnos y sentirnos cómplices con los deseos de la sociedad valenciana. En definitiva, mi proyecto es convertir en mayoría política la mayoría social progresista de la Comunidad Valenciana.


P.- Y en ese proyecto colectivo ¿Con quién cuenta usted?

R.- Con todo el mundo. Cuando se inicie el Congreso los militantes expondrán sus propuestas, y yo, estoy dispuesto a aportar aquello que sea mejor para el conjunto de la sociedad y del partido, es más, le digo que si me convencen con otras propuestas, pues yo también estoy dispuesto a aceptar otra alternativa. Yo no tengo un proyecto ni personal ni personalista. Los socialistas valencianos hemos de superar viejos funcionamientos del partido, es decir, de superar los planteamientos de las corrientes familiares, o de lo que llamaban familias. Yo estoy por un proyecto de mestizaje, de personas absolutamente válidas y asumir la pluralidad real del partido, e incidir en la necesidad de formar un equipo sólido y potente, el “dream team”, es decir, un equipo que sea válido y potente, pero también amplio. Y por ello, creo que es decisivo que todos tengan un papel.


P.- Ha mencionado la necesidad de superar etapas antiguas. ¿Comparte la tesis de Jorge Alarte que el socialismo valenciano tiene pendiente realizar un Congreso de cambio y con perspectivas de futuro? ¿Coincide con ese análisis?

R.- Yo creo que lo que hemos de modernizar es nuestra propuesta política, no en cuanto a los valores, porque como he dicho antes, nuestros valores corresponden a la mayoría social de los ciudadanos y ciudadanas valencianas, pero, insisto nuestro objetivo debe centrarse en convertir esa mayoría social en mayoría política.


P.- ¿Piensa que para dar ese vuelco electoral, es necesario conformar un liderazgo sólido?

R.- Si, pero ese liderazgo debe cimentarse en las propuestas y en la capacidad de aportar ideas y diálogo, de confluencia en un proyecto y de compartir propuestas e iniciativas. No creo en los liderazgos personales, ni en los cesarismos.


P.-¿Es usted partidario de implantar un modelo de organización al estilo PNV?

R.- Yo no diría al estilo PNV. Mire, yo en el congreso me presentaré como candidato a secretario general del partido, e insito, creo que ahora lo fundamental es fortalecer el partido y nuestro mensaje, aportando un contenido sólido bajo una dirección también sólida que nos permita marcar una nueva etapa, y después acometer la elección del candidato a la Generalitat, y será candidato o candidata quien estime la dirección y el conjunto del partido. Por tanto, en mi opinión no hemos de adelantar procesos, porque en este caso, lo que necesitamos es un proyecto de consolidación.


P.- Es decir, para usted el candidato a secretario general del partido no tiene porque ser el candidato a la presidencia.

R.- Puede serlo, pero no tiene porque ser así necesariamente. Creo que lo que hay que decidir ahora es preparar al partido para estar en condiciones de que los socialistas podamos acceder a la presidencia de la Generalitat. Eso es mi objetivo, preparar y dejar al partido en condiciones para que esté en la “pole” de cara a las próximas elecciones.


P.- En ese sentido, ¿qué ha de ser el Congreso?

R.- Un escaparate de un partido fuerte, dinámico, potente, vivo, capaz, joven… En definitiva, un partido abierto a toda aquel que quiera participar en un proyecto de progreso y modernizador para la Comunidad Valenciana y un nuevo inicio del partido socialista.


P.- ¿Y de un nuevo proyecto?

R.- Si, de una nueva etapa del socialismo valenciano en la que se combinen tres cuestiones. Primero, la prosperidad y crecimiento económico, segundo la modernización de nuestra sociedad y en tercero la suma de justicia social y el impulso de las iniciativas de emprendedores que tiene nuestra sociedad, que por cierto, han estado abandonados por el Partido Popular.


P.- Por tanto, ¿Usted es partidario de reconducir el discurso del partido?

R.- Creo que no hemos avanzado en la comunicación pública. Ignasi ha hecho planteamientos mucho más abiertos de lo que al final ha salido reflejado en los medios de comunicación


P.- Pero eso, en todo caso sería achacable a la ausencia de una adecuada estrategia de comunicación del partido…

R.- Es evidente que en estos momentos hay que cambiar la estrategia, y por tanto, la comunicación, ha de ser clave. Ojo, cuando hablo de cambio en nuestra estrategia de comunicación lo hago en un sentido amplio, no sólo centrándonos en los medios, sino de mayor relación con la ciudadanía. Porque es evidente que la comunicación en la Comunidad valenciana, especialmente en la televisión autonómica, se ha convertido en una patente al servicio del PP, y además el PP ha realizado una distribución de medios y de las televisiones digitales terrestres, coartando el pluralismo, que ha quedado soterrado. Pero todo eso, a nosotros no nos debe suponer un obstáculo, todo lo contrario, hemos de superar esa situación reinventando un nuevo escenario.


P.- ¿Con quién se siente más próximo, con Jorge Alarte o con Jordi Sevilla?

R.- Con cualquier militante del partido socialistas que quiera sumar.


P.- ¿Cree que desde la dirección federal del partido se intentará condicionar la presentación de candidaturas al Congreso?

R.- La dirección federal del partido es absolutamente respetuosa con las decisiones de los socialistas valencianos. Y ayudará a que el proceso vaya bien.

MEDITERRANEO · 22 de setembre del 2007

Bajar en formato .pdf


“El objetivo ahora es ganar las elecciones”

Joaquim Puig, PORTAVOZ ADJUNTO DEL GRUPO PARLAMENTARIO SOCIALISTA DE LES CORTS

LUGAR DE NACIMIENTO » MORELLA, 4 DE ENERO DE 1959, FORMACIÓN » PERIODISTA. TRAYECTORIA » ALCALDE DE MORELLA, DIPUTADO AUTONÓMICO Y PORTAVOZ ADJUNTO EN LES CORTS. PRECANDIDATO A SECRETARIO GENERAL DEL PSPV-PSOE.

Joaquim Puig, de largo recorrido político, aspira a liderar el PSPV-PSOE y para ello propone modernizar un partido en el que asegura que caben todos, sin personalismos, preservando los valores progresistas de una sociedad avanzada

ENTREVISTA

JAVIER ABAD

jabad@epmediterraneo.com

CASTELLÓN

-Después de una dilatada y fructífera carrera política, ¿por qué ahora quiere ser secretario del PSPV-PSOE?

-En primer lugar, quiero decir que mi opción a secretario general será cuando el proceso democrático e interno del PSPV-PSOE se abra a partir de las elecciones generales, cuando se convoque el Congreso Federal y, posteriormente, el de País. Creo que es fundamental para los partidos el respeto a las reglas democráticas y a to­das las opciones de las personas que piensan que pueden participar y aportar lo mejor de sí mismos para el futuro de este partido. En mi caso, la decisión es intentar aquello que durante estos años, a través de la experiencia y del trabajo, puedo aportar desde la convicción de que lo fundamental no es un proyecto personal, sino un proyecto que se conjugue en nosotros más que en la pri­mera personal del singular.

-Usted y Jorge Alarte -alcalde de Alaquás- son los únicos que han dado muestras de presentar su candidatura a secretario general ¿por qué cree que Jordi Sevilla todavía no se ha pronunciado, cuando se supone que así lo dejó caer Rodríguez Zapatero?

-Eso se lo debe preguntar usted a él, no a mí. Yo no tengo ninguna noticia al respecto; por tanto, lo que sí que creo como le he dicho, es que se deben seguir los procedimientos, pensar en el interés general del PSOE y, sobre todo, en la sociedad valenciana. En este momento, la prioridad máxima y fundamental para nosotros es que la etapa de progreso iniciada por José Luis Rodríguez Zapatero, que ha sido extraordinariamente beneficiosa para España en su conjunto y para la Comunitat Valenciana en particular, tenga una segunda fase de aceleración a partir de marzo del 2008, cuando ganemos las elecciones.

-¿Y por qué muchos militantes piensan que usted no llegará hasta el final, como ha pasado en otras ocasiones?

-Yo nunca he dicho en otras ocasiones que iba a ser candidato a secretario general, lo dijeron otros por mí. Ahora sí que lo he dicho y, evidentemente, mi compromiso es trabajar por este partido y poner lo mejor de mí mismo para que eso sea posible. En cualquier caso, los que deciden quién tiene que ser secretario general son los militantes.

-¿Cuál debe ser, según usted, el discurrir ideal dentro del partido para la elección de ese nuevo secretario general?

-La agenda está muy clara y dice que, en estos momentos, no se puede perder ni un minuto en mirarse al ombligo porque lo fundamental, lo básico y lo que nos jugamos por encima de todo es tener un buen resultado en el mes de marzo. Y para ello, todo lo demás debe estar en un segundo plano. Después de las elecciones generales hay que ir a un proceso democrático y es entonces cuando hay que hablar de propuestas, porque lo que necesita, fundamentalmente, el Partido Socialista es una redefinición del propio proyecto, una modernización en su conjunto de la propuesta política y de los instrumentos. Y ya, en un tercer lugar, reformular lo que es la comunicación con la sociedad. No solo en términos clásicos de medios de comunicación, también de una interrelación mucho más directa y una conexión mucho mayor con los ciudadanos.

-¿Entonces, tras el varapalo electoral del pasado mayo, usted es de la opinión de que su partido debe asumir cambios, como una refundación de planteamientos, que no de ideas?

-Hay que preservar los valores y, como he dicho, no hemos sido capaces tampoco de transmitir bien esos valores progresistas que están claramente identificados en el pueblo valenciano y que, no me cabe ninguna duda, son mayoritarios porque es mayoría la gente que piensa en términos progresistas. La valenciana es una sociedad moderna, avanzada, con un alto contenido social y el Partido Socialista tiene que perfilarse en un nuevo diseño que atienda a estos valores pero que a la vez actualice lo que es la propuesta política. Por citar tres cosas básicas, hay un eje fundamental que es la prosperidad porque está claro que los socialistas apostamos por el crecimiento económico y por la prosperidad, Por otra parte, se debe apostar por esa segunda modernización de la Comunitat Valenciana, con unas infraestructuras adecuadas. Y, en tercer lugar, por la justicia social ya que para todo el crecimiento económico de la Comunitat tiene menos equipamientos y posibilidades sociales que la inmensa mayoría de las otras comunidades autónomas. Eso es lo que hay que reestructurar y reequilibrar.

-¿Y no cree que uno de los problemas que ha tenido el PSPV-PSOE en los últimos años es que no ha sabido transmitir que es alternativa real al PP, que es partido de gobierno y que, por tanto, no necesita de terceros para gobernar?

-En todo momento el Partido Socialista es un partido de gobierno, de hecho está gobernando en España y en muchos ayuntamientos. Somos un partido de gobierno, pero eso no quiere decir que no tengamos capacidad de crítica y de rebeldía frente a lo que no nos gusta. Pero, obviamente, nuestro proyecto está encaminado a transformar la socie dad y para eso tenemos que gobernar. Creo también, con total claridad, que el PSOE tiene que tener un proyecto autónomo. Nosotros debemos ocupar la centralidad del espacio político valenciano desde la autonomía, que es fundamental, y esa capacidad de encontrar la centralidad es un elemento clave.

-¿Con qué apoyos va a llegar usted al congreso de 2008?

-Bueno, vamos a ver. Esta propuesta de modernización del PSPV-PSOE, del proyecto socialista valenciano, es absolutamente mestiza en el sentido de que no es de nadie, todo el mundo puede caber y participar. Si yo soy elegido en su momento secretario general va a ser por el apoyo de gente muy diversa y el nuevo equipo que se conforme tendrá una representación tanto territorial como de planteamientos totalmente plural, porque es lo que necesita este partido, sumar y sumar y con inteligencia.

Pero, insisto, todavía no estamos en ese punto del proceso y lo único que me preocupa ahora es ser capaz de ayudar a mi partido a conseguir en las próximas elecciones generales el mejor resultado posible y lograr el tercer diputado por Castellón, que es un elemento importante para re forzar una mayoría suficiente de gobierno socialista y continuar creciendo económica y social-mente como se ha venido haciendo en estos cuatro años.

-¿Ve usted adecuada crear una estructura provincial?

-Debemos encontrar una fórmula para que, sin abandonar una estructura que puede tener un valor, y lo tiene, como son las comarcas, se cree una estructura de carácter provincial.

-Los delegados de Castellón, en algunas ocasiones, han ido unidos a los congresos para lograr una mayor cuota de poder para la provincia. ¿Ve ahora usted factible que esto suceda en torno a su candidatura?

-Espero que vayan todos los delegados unidos en favor del PSOE y con propuestas claras para el conjunto de los ciudadanos,

-¿Mantiene usted la conveniencia de que el secretario general que salga del congreso sea también el candidato?

-El candidato a presidente de la Generalitat se deberá elegir en su momento, dentro de tres años aproximadamente, y en ese momento si yo soy secretario general será candidato, o yo lucharé para que sea candidato, el que mejor posicionado esté para poder ganar las elecciones. No se elige ahora el candidato a la presidencia de la Generalitat, ahora vamos a elegir el candidato a secretario general y nada más. Y ese secretario general tiene que conformar un equipo potente, sólido, riguroso, capaz de reformular el proyecto y, posteriormente, llevar al partido a unas condiciones positivas para que cuando falte un año para las próximas elecciones autonómicas se pueda elegir a un candidato con la mayor solvencia posible. Mi objetivo es evidente: que el PSOE alcance la mayoría suficiente para gobernar en las próximas elecciones y para ello no caben ni personalismos ni operaciones que respondan solo a un interés particular.

-Pero sí es importante que el secretario general o el que vaya a ser candidato esté en les Corts Valencianes y ahora mismo de todos los nombres que suenan solo está usted.

-Es un tema importante lo del Parlamento valenciano y, en ese aspecto, a pesar de que el PP intenta amordazarlo en muchas ocasiones y no le da la vida y la centralidad política que es necesaria en cualquier sistema democrático, sí que es cierto que es fundamental para desarrollar lo que es la actividad política.

-Está claro que el PP seguirá basando su campaña en el victimismo frente a Madrid. ¿Qué medidas plantean ustedes para contrarrestar esto?

-El PP lo que está haciendo en la Comunitat Valenciana es una dejación absoluta de sus funciones. En estos momentos, el presidente de la Generalitat -Francisco Camps- ha decidido pasar, simplemente, a tener un papel se­cundario como coordinador electoral del PP de la Comunitat. Desde el inicio de esta legislatura no ha habido ninguna propuesta, ni en el debate de investidura, ni ninguna actuación que dé solvencia al Gobierno del PP.

El Sr. Camps tiene la legitimidad, como la tiene el Sr. Zapatero, y lo que tienen que hacer las instituciones es trabajar por la colaboración y cooperación porque, una vez pasadas las elecciones, lo necesario es que las instituciones se pongan de acuerdo para la mejora de la calidad de vida de los ciudadanos. Todo lo demás es una apropiación indebida de la institución en favor de un interés partidario, que es lo que está haciendo en estos momentos el PP, refugiarse en las acusaciones permanentes y de victimismo frente al Gobierno de España y no hacer su trabajo, porque tiene mucho trabajo.

Mire usted, cuando leía la semana pasada en su periódico la entrevista del Sr. Rambla me produjo sonrojo lo que dijo de que el PP cumple sus promesas. En la anterior legislatura, el 90% del programa electoral en esta provincia no se ha cumplido y podemos referirnos a Mundo Ilusión, la Ciudad de las Lenguas, el Parque Científico de la UJI, las carreteras... La autovía del interior (A-7) en tres legislaturas solo se ha desdoblado desde Castellón hasta la Pobla: doce años para menos de 20 Km. Autosatisfacción del PP, de qué. el autobombo les ha funcionado, pero no se puede engañar permanentemente a todos. Eso es así y es el momento de que la Generalitat afronte la realidad de los hechos, que no es otra que tenemos una Comunitat que, a pesar de que en España en general las cosas van muy bien, aquí ha subido el paro en el mes de agosto.

Tenemos una sociedad donde hay un gran dinamismo empresarial, que desgraciadamente cada vez está flagelado por la falta de apoyo de la Generalitat. Los planes de competitividad de la industria están bajo mínimos y, a pesar del gran impulso de los empresarios locales en el turismo, este año hemos pasado dificultades. Y, desde luego, no se ve iniciativa por parte de la Generalitat en una autonomía que es la más endeudada de toda España y con graves dificultades en cuanto a infraestructuras y política social. Lo que liderarnos muchas veces es lo negativo.

-En esa reivindicación del PP hay un elemento clave como es el agua, que depende del Gobierno central, y ustedes parece que no han sabido vender aquello que se está haciendo. Además, ha habido mensajes contradictorios en Castellón, Valencia y en Madrid.

-En primer lugar, tenemos que poner las cosas en su sitio. Sí que es verdad que hay un problema de debate sobre la comunicación y a los hechos nos atenemos. En ocho años de gobierno del PP no se sumó ni un hectómetro cúbico de agua para la Comunitat Valenciana. Se aprobó un Plan Hidrológico que, al final, lo que son las obras el PSOE no las derogó, sino que las está desarrollando y algunas incrementando. Por ejemplo, en la zona de Castellón que pertenece a la Confederación del Ebro se han hecho dos actuaciones que van a significar la solución definitiva para los problemas del agua de una amplia comarca. En el caso de la Plana, en estos momentos se está debatiendo la cuestión de las desaladoras que se van construir. La utilización política es evidente porque al PP no le interesa que llegue agua y en eso ha encontrado un filón para desgastar al Gobierno. Creo que en este momento el PSPV-PSOE tiene que ser capaz de explicar claramente cuál es su posición sobre el agua y, sobre todo, no dar excesivos bandazos. Tenemos que garantizar agua para el desarrollo de nuestra Comunitat y lo debemos hacer con los instrumentos que tengamos en nuestra mano, los que sean.

-Esta misma semana el secretario general del PSPV-PSOE, Ignasi Pla, ratificó públicamente la candidatura de Jordi Sevilla al Congreso por Castellón.

-En lo que a mí se refiere, es el mejor candidato que podemos presentar en este momento y, por tanto, creo que debe repetir. Y, además, creo que no va haber ningún tipo de problema en la elaboración de las listas porque nuestro objetivo está tan claro que no puede estar distorsionado por nada más. Y si me permite, hay que mirar hacia el otro lado, porque allí sí que hay un problema serio al querer ocultar a quien fue presidente de la Generalitat -Eduardo Zaplana-. En el PP sí que hay un grave problema de tensiones internas.

las frases

► LAS BASES PARA EL FUTURO DEL PARTIDO

"Lo que necesita el PSPV-PSOE es una redefinición de! proyecto y una modernización de !a propuesta política"

► SU PRECANDIDATURA A LA SECRETARÍA GENERAL

"No busco un proyecto personal, sino uno que conjugue en nosotros más'que en la primera persona del singular"

LAS CLAVES PARA LA NUEVA ETAPA

"Debemos ocupar la centralidad del espacio político y esa capacidad para encontrarla es un elemento clave"

CRÍTICAS A LA GESTIÓN DEL CONSELL DE CAMPS

"El autobombo al PP le ha funcionado, pero no se; puede engañar permanentemente a todos los ciudadanos"

El Punt: Entrevista a Ximo Puig

EL PUNT · Del 16 al 22 de setembre del 2007


Ximo Puig

Candidat in pectore a la secretaria general del PSPV-PSOE i amb el pes feixuc del «lermisme», l’alcalde de Morella vol convertir-se en el líder d’un partit amb un perfil més valencianista

TERE RODRÍGUEZ Des de la privilegiada talaia de Morella, municipi de què és alcalde des de 1995, Puig ha observat el declivi del seu par­tit, el socialista, en els últims anys. Disposat a optar a la se­cretaria general de la formació per construir el nou socialisme valencià, sap que l’etiqueta de «lermista» —va ser cap del gabinet de l’expresident— pe­sarà en la seua candidatura, però ho considera més promp­te un avantatge que no un in­convenient.

Per què aspira a conver­tir-se en líder dels socialistes valencians?

«No es tracta de cap pro­jecte personal. Simplement estic al capdavant d’un grup de perso­nes que vol posar en marxa un projecte de modernització del partit per convertir-lo en una op­ció de progrés necessària per al País insistic: no és un projecte personal, ja que el nou socialisme valencià ha de desen­volupar-se més en primera perso­na del plural que en primera per­sona del singular.»

Finalment, no hi haurà congrés extraordinari, una possibilitat que vosté rebutja­va. Per què?

«Perquè no era el moment adequat. Les prioritats de l’agen­da del PSPV-PSOE són acabar de governar adequadament les polí­tiques de Rodríguez Zapatero al País Valencià; després hem de preparar propostes electorals per al País Valencià i incorporar-les al programa electoral i, final­ment, fer una campanya electoral suficientment rigorosa, forta i en convicció per convéncer la socie­tat valenciana que el govern de Rodríguez Zapatero ha sigut po­sitiu per a aquesta comunitat i que no es deixe véncer per la propa­ganda de C9.»

Afirma que un canvi de cartell no assegura res. Quines són les transformacions imme­diates que necessita el partit per convéncer majoritària­ment el nou l’electorat?

«Efectivament, el canvi de cartell no resol el nostre proble­ma, que és de difícil solució, però jo veig molt clar que hi ha possibilitats de canvi en 2011 i ho crec perquè nosaltres vam passar de la majoria absoluta a perdre les eleccions. Ara bé, hem d’abando­nar el discurs del catastrofisme i de la resignació. El País Valencià té unes condicions clares per a ser governat des del centreesquerra i hem de saber què estem fent ma­lament i què ha passat en la socie­tat valenciana, perquè és clar que hi hagut un distanciament entre allò que nosaltres prioritzem com a carta política i el que volen els valencians. I no ha de ser només fer una anàlisi dels resultats elec­torals, no hem de deixar-nos por­tar per les situacions conjuntu­rals, hem de donar solidesa a les nostres propostes i mai fugir dels nostres valors.»

I s’han perdut aquests valors?

«Jo crec que en molts ca­sos no hem sigut capaços de transmetre adequadament el que són els valors tradicionals pro­gressistes. La justícia, la igualtat, la solidaritat, la cooperació, la lli­bertat, la pròpia estima al País... són valors que comparteixen tots els valencians i són el que els so­cialistes hem de representar per a tots els ciutadans, i ara no ho fem.»

El seu perfil polític, més valencianista que els dels al­tres candidats, és un avantat­ge en aquesta carrera?

«Jo no parlaria de candi­dats encara, ja que no hi ha for­mulat cap procés obert i, per tant, parlar de candidats formals no se­ria raonable fins que no passen les eleccions generals. Al marge d’aquestes consideracions, és evident per a mi que el socialisme valencià no pot estar allunyat del que és el propi territori, del que és el propi sentiment de poble i el que és la pròpia cultura, i ha de ser valencià des d’una perspectiva identitària incloent, no excloent. Els socialistes valencians hem d’intensificar més el nostre perfil valencianista.»

«EL SOCIALISME VALENCIÀ NO POT ESTAR ALLUNYAT DEL QUE ÉS EL PROPI TERRITORI, DEL QUE ÉS EL PROPI SENTIMENT DE POBLE I EL QUE ÉS LA PRÒPIA CULTURA»

És que fa la sensació que la Blanqueria és una fede­ració de Ferraz i que necessita el vistiplau de Madrid per a prendre qualsevol decisió.

«És veritat que els senti­ments dels valencians quan els pregunten sobre la seua identitat es vinculen clarament amb Espa­nya. Això és així, però no vol dir que els socialistes cada vegada puguem tindre un perfil més valencianista per fer saber als ciuta­dans que estem ací per defendre els interessos d’aquesta terra. Pe­rò en el nostre cas sí que és evi­dent que en alguns moments hem fet la impressió que estem sucursalitzats.»

La tutela de Madrid els dóna més confiança?

«Ací el PSPV, històrica­ment, ha tingut una capacitat d’autonomia molt alta, però pas­sa que potser no hem sigut capa­ços de demostrar-ho com sí que han fet altres federacions. Sem­pre hem sigut un partit molt res­ponsable i això crec que electo­ralment ens ha beneficiat. Ara bé, és palés que hi ha qüestions en les quals hem de tindre la suficient força per a imposar posicions que vénen de lluny i que afecten altres autonomies com la nostra, que ha tingut una força econòmica prò­pia.»

El fet de pertànyer a la família «lermista» li farà tindre més suport que altres precandidats no adscrits a cap fa­mília?

«Jo crec que les famílies han desaparegut i això ha sigut un èxit d’Ignasi (Pla) que ha aconse­guit fer causa comuna. I necessi­tem seguir en aquest camí i obli­dar-nos dels processos traumà­tics de democràcia interna de fa huit anys. En aquest sentit, crec que hi ha una major serenitat al si de partit. Jo crec en el mestissatge absolut, crec que s’ha d’aprofun­dir més encara en la desaparició total de les famílies. I el fet que em relacionen amb Joan Lerma —m’enorgulleix haver sigut cap del seu gabinet— és afegir un va­lor a la meua candidatura, perquè ha estat en llocs de molta respon­sabilitat i he aprés molt al seu cos­tat. Ara bé, Joan Lerma és patrimoni dels socialistes i dels valen­cians i això no ho pot patrimonialitzar ningú que opte ser candidat a secretari del partit, ell està per damunt d’aquesta qüestió.»

Per tant, podem aventu­rar un congrés tranquil?

«El nivell de maduresa d’aquesta organització farà im­possible que es repetisquen els episodis que es van viure en els anteriors congressos. S’abordarà amb total naturalitat i cadascú aportarà al procés allò que pense que és millor per al conjunt de l’organització i la societat valen­ciana. Hem de treballar amb molt de seny i de trellat, i amb capacitat de saber que el més important no és el partit socialista, sinó que hi haja un projecte sòlid i progres­sista per al País Valencià perquè en 2011 siga possible el canvi, ja que això significarà més justícia social i més valencianisme.»

Podria donar-se la si­tuació de tindre un candidat de consens abans del congrés?

«Qualsevol situació futurible és possible, ja que falta un any per a culminar un procés que s’ha avançat per raons electorals. El partit el que ha de fer és buscar una bona direcció, recuperar més força a la direcció col·legiada, re-formular el projecte i fer una profunda reactualització tant de les formes organitzatives com dels projectes.»

«EL NIVELL DE MADURESA DAQUESTA ORGANITZACIÓ FARÀ IMPOSSIBLE QUE ES REPETISQUEN ELS EPISODIS TRAUMÀTICS QUE ES VAN VIURE EN ELS ANTERIORS CONGRESSOS»

Alguns analistes assegu­ren que finalment abandonarà la carrera cap a la secretaria general per un càrrec en la fu­tura direcció. S’equivoquen?

«L’únic que puc dir és que a hores d’ara el que tenim són pre-candidats, gent que ha demostrat, com el meu cas, la seua disposi­ció, voluntat i convicció per a liderar un nou projecte. Considere que puc ser un bon secretari gene­ral per a aquest moment per en­fortir una direcció col·legiada po­tent i per rellançar el projecte socialista al País Valencià. I en prin­cipi la meua disponibilitat és to­tal. La gent que pensa que em reti­raré s’equivoca, perquè aquesta no és una candidatura ni conjuntural, ni personalista, ni de presa de posició. És una candidatura, per la gent que li fa costat i per la gent que pot donar-li suport, molt sòlida.»

Si el «full de ruta» esta­bleix màxima prioritat a la preparació de les generals i després al congrés, quan faran els socialistes un debat en pro­funditat sobre els resultats electorals autonòmics?

«Jo crec que el debat en profunditat és millor fer-lo fora dels contextos electorals. I efecti­vament, ara toca seguir el full de ruta i treballar seriosament els te­mes que volem que el PSOE porte i defenga en el programa electo­ral. I després trobe que el congrés serà el marc més oportú per a debatre amb profunditat la reforma del socialisme valencià, veure quins han sigut els nostres punts febles, i després, mes enllà de la casuística d’unes eleccions deter­minades, fer una revisió del que passa en general. I finalment te­nim la qüestió fonamental.»

Quina?

«La modernització del nou socialisme valencià i que, al meu parer, ha de fer-se en dos aspec­tes: de primer, en tot allò que té a veure amb la societat valenciana i procurar la segona modernització del País per a buscar, en segon lloc, la modernització de la prò­pia oferta política en termes d’instruments de treball. En aquest sentit, cal defendre la polí­tica i buscar noves formes d’ad­hesió, perquè la gent està molt de­cebuda amb el nostre treball i ai­xò perjudica d’una manera clara les societats progressistes i crea una espècie de burocràcia que contribueix a l’afebliment de la democràcia.»

— Vicepresident de les Corts en la passada legislatura i actual portaveu adjunt segon del Grup Socialista, com pen­sa que serà aquest exercici parlamentari amb un presi­dent Camps crescut i un grup sòlid com a suport?

«Camps està desaparegut i està vivint de les rendes passades. El seu objectiu és clar i palés: po­sar a la disposició de Rajoy el par­tit, la Generalitat i la Comunitat per a ofrenar noves glòria a Es­panya’. Tenim molts problemes i l’únic que el preocupa és veure com ell i el PP valencià poden ajudar Rajoy a guanyar. Des del punt de vista de la perspectiva parlamentària no s’albiren nove­tats, però la paràlisi del govern ens ha d’esperonar a fer una mi­llor oposició, seriosa, respectuo­sa, rigorosa, no demagògica i fer­ma en aquells temes que són ne­gatius. Necessitem fer una oposi­ció que critique tot allò que carac­teritza el govern de Camps: el balafiament, la corrupció i la inefi­càcia. I per cada crítica que fem oferir una alternativa.»

«LA GENT QUE ES PENSA QUE EM RETIRARÉ A MITJAN CAMÍ S’EQUIVOCA, PERQUÈ NO ÉS UNA CANDIDATURA NI CONJUNTURAL, NI PERSONALISTA, NI DE PRESA DE POSICIÓ»

Amb el grup de Com­promís trencat, semblen l’úni­ca oposició sòlida a Camps. Va l’esquerra a la deriva?

«El procés de Compromís va començar malament des del principi i, malauradament, no va donar els resultats que es prete­nia. Nosaltres hem de tindre un projecte absolutament autònom i això no vol menysprear res, però no el podem compartir més que amb els ciutadans.»

Durant molts anys ha sigut l’assot de Carlos Fabra, però ell continua en el càrrec.

«Crec que políticament ja ha començat a decaure. I, per des­comptat, hem de tindre confiança en la justícia, però més enllà del que diga la justícia hi ha unes res­ponsabilitats polítiques que l’afecten i que també afecten Camps, que és incapaç, per les seues hipoteques internes, de desfer-se’n, cosa que ja s’hauria pro­duït en qualsevol democràcia.»